Capturan cuatro toneladas de carne en mal estado e investigan si se ha comercializado

Nadie se explica cómo ha podido suceder, pero la realidad es que el servicio de Sanidad de la Junta de Castilla y León se ha visto obligado a decomisar una partida de cuatro toneladas de carne que ha llegado a León caducada, en mal estado y sin la trazabilidad -"o lo que es lo mismo sin que se sepa la procedencia, el matadero, el despiece y la comercialización posterior-" necesaria para que pueda pasar a la cadena alimenticia.

Según informan a Diario de León fuentes de la investigación todo se inició hace aproximadamente dos semanas con una actuación del Seprona que, tras una aviso, detectó parte de la carne e interpuso denuncia ante la Fiscalía por tratarse de un posible delito contra la salud pública. Es, precisamente la propia Fiscalía quien dirige desde ese momento la investigación y quien pone en alerta a los servicios de Sanidad de Junta de Castilla y León.

Las pesquisas se centran en la empresa Friolen, con sede en San Andrés del Rabanedo, que ya ha sido visitada en varias ocasiones por los veterinarios de la Delegación Territorial de la Junta y por los agentes del Seprona. La carne ilegal capturada, además de numerosos despojos también ilegales y en mal estado, está congelada, es de ovino, bovino y porcino y alguna se encontró en varias naves en el entorno del matadero de León. La principal preocupación de los servicios de salud pública y de la Fiscalía de León es saber de cuántas partidas de carne se está hablando y si es posible que ésta haya pasado ya a los cauces de distribución y haya podido ser vendida para el consumo humano. En cualquier caso, desde la propia investigación, ya se dice que el área de influencia en la que se podría haberse distribuido esta carne es León capital y San Andrés.

Otra de las incógnitas que quieren despejar la Fiscalía y el Seprona es saber de dónde procede esta partida de carne ilegal, aunque desde algunas de las fuentes consultadas ya se apunta que pudiera venir del Este de Europa. En este punto de la investigación lo que se hace es tratar de encontrar los lugares en los que se haya podido distribuir esta carne.

Sin detenidos. Hasta el momento, siempre según las fuentes a las que ha tenido acceso este periódico, no se han producido detenciones porque los trabajos del Seprona aún no han concluido, algo que se espera pueda suceder esta misma semana. Será en ese momento, al final de la investigación, cuando se decidan las posibles detenciones y su puesta a disposición judicial.

Las cuatro toneladas de carne caducada y en mal estado se encuentran en una nave precintada. El procedimiento que se sigue una vez que se detecta este tipo de carne ilegal, porque cabe recordar que cualquier produzco cárnico que venga sin la trazabilidad no se puede consumir aunque se encuentre en perfecto estado, es que el servicio de Sanidad de la Junta envíe a un veterinario para que revisa la carne, los lotes y decida cuál cumple los requisitos de salubridad y legalidad y cuál no. La carne que se determina que no puede consumirse es automáticamente decomisada y precintada en una nave.

A partir de aquí, Sanidad esperará a recibir los diversos expedientes sancionadores, tantos como lotes de carne se hayan encontrado y así concluirán las posibles sanciones. Este último paso no se dará si, como sucede en esta investigación, el procedimiento se está llevando por vía penal.

Fuente: diariodeleon.es