La obesidad, la enfermedad del s. XXI

Cada vez es más frecuente ver en las clínicas veterinarias mascotas con problemas de peso. Se calcula que aproximadamente un 25% de las mascotas tienen sobrepeso o son obesas y este porcentaje va en aumento con el tiempo. La obesidad puede alterar considerablemente la salud de la mascota por lo que es necesario ponerle freno.

Problemas asociados

La obesidad presenta una serie de problemas asociados, entre ellos una disminución de la esperanza de vida. Otros son:

• Problemas cardiorrespiratorios.
• Patologías osteoarticulares.
• Problemas para el manejo y la exploración clínica.
• Problemas en la reproducción: dificultades en los partos, etc.
• Diabetes
• Mecanismos de termorregulación alterados.
• Complicaciones en las cirugías: problemas con la anestesia y otros medicamentos, más tiempo en el quirófano, recuperación lenta, etc.

¿Cómo saber si la mascota tiene sobrepeso?

El propietario puede comprobar fácilmente el estado corporal de su mascota. Para ello sólo tiene que pasar la mano por sus costados: si se notan las costillas, todo está bien; sin embargo, si no se palpan las costillas y sólo se nota grasa, existe un problema. Igualmente, si miramos al animal desde arriba y se le puede ver la cintura, está en su peso normal: si no hay una cintura que separe el tronco del abdomen, el animal tiene sobrepeso y puede llegar a convertirse en obeso si no se actúa de forma inmediata.

¿Qué hará el veterinario?

Si en una de las revisiones el veterinario detecta algún problema de peso pondrá en marcha un plan específico para cada paciente para combatir el problema.

• Escoger un tratamiento nutricional adecuado, en el que se indique claramente la cantidad de alimento diaria y el tipo de pienso.
• Elaborar una tabla de ejercicios físicos.
• Hacer un seguimiento estricto de la pérdida de peso y ayudar a la mascota a mantener su peso ideal el resto de su vida.

¿Qué puede hacer el propietario?

Para que un perro o gato recupere el peso ideal es fundamental la implicación del propietario. El veterinario indicará el tratamiento adecuado y realizará el seguimiento del animal en la clínica, pero si el propietario no está mentalizado y se mantiene firme hasta que finalice el proceso, no se conseguirá el objetivo final. Además hay que tener en cuenta que son tratamientos largos, que duran varios meses y que una vez conseguido el peso óptimo se ha de mantener de por vida con una dieta adecuada. Así pues el propietario puede ayudar en casa si sigue las siguientes recomendaciones:

• No hay que darle comida en la mesa, ni entre horas.
• También hay que evitar los snacks y las golosinas o bien utilizar en la medida de lo posible las que son bajas en energía.
• Debe reducir la ración y no darle más cuando se la acabe.
• Conviene dividir la ración diaria en varias porciones para que la mascota tenga más sensación de saciedad.
• No se debe utilizar la comida como un sustituto del cariño y de la atención.
• Se debe alargar el tiempo de paseo o aumentar la actividad en casa con juegos, tablas de ejercicio sencillas, etc.

¡Atención!

• Los alimentos secos se presentan en sacos de diferentes tamaños y se pueden dosificar con facilidad, por lo que son muy adecuados en las dietas de reducción de peso.
• Si la alimentación es correcta el animal no necesita ningún tipo de complemento alimenticio; en todo caso será el veterinario el que lo indique.
• Si la mascota no está acostumbrada a hacer ejercicio conviene empezar por paseos cortos e ir aumentando progresivamente la duración de los mismos.

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