El RIVIA certifica la calidad de sus procesos

El 1 de marzo AENOR certificó oficialmente que el Consell Valencià de Col.legis Veterinaris (CVCV) dispone de un sistema de gestión de la calidad que es conforme a la Norma ISO 9001:2015 en lo que se refiere a su gestión del Registro Informático Valenciano de Identificación Animal (RIVIA). Para Inmaculada Ibor, presidenta del CVCV -la entidad que es responsable del funcionamiento de este registro, cuya titularidad es de la Conselleria de Agricultura- con la concesión de este reconocimiento “se pone en valor el trabajo que esta entidad realiza. Es quizá la mejor manera  de consolidar los procesos de mejora y de garantizar que el nivel de exigencia nunca se relaje, que continuemos trabajando para ser más eficaces, mejorando siempre el servicio”.   Efectivamente, a partir de la consecución de esta certificación ISO 9001:2015, el RIVIA tendrá que pasar anualmente un nuevo examen por la empresa certificadora.

    Los trabajos para la consecución de este reconocimiento se iniciaron a mediados del año pasado. Para llevarlo a cabo se ha requerido de la implicación de la Junta de Gobierno del CVCV y de una considerable inversión de tiempo y esfuerzo, fundamentalmente a cargo del personal del RIVIA (en la foto). 

   En la primera fase se abordó la implantación del sistema de calidad,  de manera progresiva, aplicándolo proceso a proceso, hasta conseguir ‘engrasar’ y poner en funcionamiento la totalidad del sistema de Calidad. Para adaptar los procedimientos a la norma se formó al personal, se realizaron reuniones de trabajo y multitud de pruebas en la plataforma... Una vez finalizada la implantación del sistema, se llevó a cabo una auditoría interna para así asegurar su correcta puesta en práctica. Cuando se superaron sendas fases, se inició el proceso de la certificación a través de los auditores de AENOR.

Trazabilidad
Esta Norma ISO es una herramienta que permite llevar una trazabilidad de todos los procesos, de tal manera que se pueda saber cómo reaccionar en situaciones de funcionamiento normales, óptimas o adversas. Su implantación permite satisfacer a todas las partes interesadas que, de hecho, intervienen en el RIVIA, desde los veterinarios y centros colaboradores, hasta los organismos oficiales, tales como ayuntamientos y las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, así como -claro- los usuarios primeros, es decir, las personas titulares de animales.